5 Agosto: Nouadhibou - Nouakchott

Nouadhibou: la segunda ciudad más grande de Mauritania y especialmente conocida por su bahía, en la que descansa un cementerio de barcos con decenas de navíos varados como ballenas oxidadas.



Después de una parada imprescindible para contemplar una parte de su grandeza, seguimos rumbo a, primeramente, Cabo Tafarit (la deuda pendiente del día anterior).

Puesto que la llegada había de ser por pista a través del parque del Banco Arguin los componentes de esta ''RAID BURKINA FASO - CON EL MOJO PICÓN A UN PASO'' estaban de la siguiente forma:

  • Por un lado: La H1 y el R19 no tenían ganas de pista y avanzaron hasta Nouakchott por carretera.
  • El Patrol debía seguir dando vueltas por Nouadhibou con Carlos vestido de Mauritano.
  • El Toyota decidió no seguir bajando y, al parecer, comenzó el retroceso.
  • La Mitsu canaria, la VW a los mandos de Josete y las motos capitaneadas por León y Andrés, seguimos con el itinerario previsto.

De camino y cerca del cruce con la frontera ''innombrable'', una cartel te recuerda que si tienes que orinar no te metas muy hacia dentro.


Comenzaba a escasear otro color que no fuese el de la arena, que por momentos aumentaba de la misma forma que aumentaba el calor....lo cual hacía el trayecto incómodo para los coches y heroico para las motos.


En la entrada de la pista que llevaba a Cabo Tafarit nos encontramos los 4 vehículos.

Mientras comentábamos qué hacer ya que la arena (finísima) dificultaba el paso a las motos y el calor, que resultaba insoportable (creo recordar que el termómetro de Josete llegó a alcanzar los 50º en un momento dado), se lo dificultaba aun más...un mauritano paró su Navara frente a nosotros para preguntarnos si necesitábamos ayuda (esto empezaría a pasar bastante).

Más que ayuda, orientación:

- Está accesible la pista hasta Cabo Tafarit?
(esto preguntado en un básico france-english a la española)

- Para la Mitsu, sí. Para la VW, lo dudo. Para las motos, misión imposible con esta arena.


Aun nos queda el consuelo de que, en el fondo, lo importante no es conseguirlo, es haberlo intentado!

Nuevo objetivo: Nouakchott!!

Arena, arena, arena y algún árbol despistado. En alguna ocasión una haima refugia a toda una familia del áspero siroco.


-Siroco??? Un siroco es lo que les debe estar dando a los moteros!!!!

Ya casi llegando a la ciudad encontramos una pista que llevaba al mar.
La idea principal era llegar a él y dejar que el Atlántico se llevase los kilos de arena y calor de nuestros cuerpos.

Entrando en ella la VW y nosotros nos alcanzan los moteros....se quitan los cascos...y tengo una imagen tatuada en mis retinas que describe el siroco que les dió.

Cuando Andrés se quita el casco veo (muy extrañada) que la única parte visible de su cabeza son los ojos y, bajo estos, una camiseta beige de bebé de no más de 6 meses. El cuello de la camiseta sobre la nariz, manchas de papilla resecas que le llegaban hasta la barbilla y las mangas (ay, esas mangas!!) a derecha e izquierda de su cabeza con las orejas haciendo que estas se mantuviesen en horizontal.

Evidentemente, habian varias preguntas pendientes:
  1. Por qué lleváis camisetas de bebé sucias en la cabeza?
  2. Por qué Andrés la lleva colocada como si su cabeza fuese una persona más?
  3. De donde, en medio de la nada, las habéis sacado?
Lo mejor, la respuesta de León:
  • Estas camisetas sucias hoy nos han salvado la vida!!.
(Hay que ver el valor que les damos a las cosas a 50º y en medio del desierto!)


Si yendo en coche habías de llevar manga larga para que el sol no te abrasase, bajar las ventanillas no era buena opción porque el aire, cálido y seco, se hacía irrespirable y la arena en polvo que levantaba te tapaba cada uno de los poros....yendo en moto y saboreando sin chasis la temperatura, el viento y la arena, no es de extrañar que acabasen empapando en agua y poniéndose las camisetas que Dani (H1) les dio para, al menos un poco, aliviarles y dejarles respirar.

Pero, como no tenían bastante con el tramo por carretera, se unieron a los coches para atravesar la pista.


La ida, con el único incidente de que no llevaba al océano y dimos media vuelta.
El retorno...con el único incidente de que: al Petit Brother no le arranca la Suzu!!!!

Y ahí va el remedio a la canario-africana de Juan:
  • Ne pas Problem!!! Se saca la eslinga y remolcamos al pisha para que la arranque en marcha!!
Y dicho y hecho: se saca la eslinga, enganchan la moto, Juan pone la marcha atrás, suelta embrague, pisa acelerador y...el pisha casi sale volando!!


Finalmente toquetearon a derecha y a izquierda... tiraron un cable de un sitio a otro (lo siento en el alma, las clases de mecánica y/o electricidad-electrónica me las salté) y arrancó.

Entramos en Nouakchott, como era habitual en nosotros, muy entrada la tarde.

Y de nuevo un día más la única rutina: buscar donde dormir, ducharse y quitarnos el desierto que nos habíamos llevado ese día encima, cenar y a dormir!!


1 comentario:

  1. Y... en tierra de nadie (Marruecos/Mauritania), no se te ocurra perder el pasaporte, ojo a los pillabichos que deambulan por allí, lo están con el único pretexto de hacer negocio.
    Del viaje, de este viaje, uno de los días más espectaculares es el Nouadhibou /Nouakchott, pero nunca por carretera. Esta carretera es prácticamente nueva (aprox. 10/12 años), anteriormente la única carretera que había era atravesando el parque D’Arguin (cabo Tafarit), y por la playa, teniendo en cuenta las mareas, hasta Nouakchott, eso sí, para europeos, mínimo con vehículos 4X4……., asignatura pendiente.

    ResponderEliminar

ir arriba